El Chief Marketer’s “2011 Social Marketing Survey” muestra interesantes datos acerca de cómo los encargados de marketing de medios sociales están midiendo.
No quiero profundizar –pero si mencionar– que entre los encuestados un 28% reconoce no ser muy efectivo y un 12% confiesa cero efectividad respecto a medir. En suma es un 40% alarmante de gente que debería dedicarse a otra cosa o capacitarse con urgencia.
Pero lo que me parece más interesante destacar es lo siguiente:
La gran mayoría (60%) mide por el número de "amigos", "seguidores" y "me gusta". Esto viene bien, ya que son parámetros que dan cuenta de una relación de continuidad, controlada por los usuarios, y tienen incidencia natural en la comunicación que ocurre una vez establecido el canal. No es lo mismo un usuario que hace click en un link –y puede no volver– que uno que decidió voluntariamente seguir informándose sobre una marca.
Similarmente, un 39% pone atención a compartir, reenviar, retwitear o postear contenido de la marca. Un número significativo para un parámetro crítico, si reconocemos que el pulso –y especialmente el crecimiento– de las marcas en las plataformas sociales está condicionado por la propagación del contenido hecha por los usuarios.
Que estos dos parámetros estén presentes en un número alto muestra que hay una consciencia buena de la naturaleza del paisaje comunicacional online. Hemos avanzado bastante desde el tiempo de los banners clickeados y páginas vistas.