Ese sábado en la mañana sentí un ruido inmenso y desagradable, no sé si lo soñé o lo oí... fué como una mezcla entre explosión, trueno, grito y chirrido. Lo curioso no es haber despertado así, pues me ha pasado otras veces. Lo curioso es que a esa hora estaba en Santiago, a más de 100 km del lugar de la explosión. Miré el reloj, vi que eran pasadas las ocho y seguí durmiendo. Poco rato después empezaron a sonar los teléfonos, y comencé a ver las imágenes por Internet y televisión. A veces tengo brujismos así, pero esa es otra historia.Cuando por fin pude acercarme a la calle Serrano, vi que no era muy distinta de una zona de guerra que había visto en Children of Men, una de las películas que más me han gustado en la vida. Pero esto era de verdad, y no me gustó en absoluto. Colchones, veladores y partes de personas llegaron hasta el cerro Cordillera, donde las casas no sólo perdieron vidrios. Puertas y ventanas se descuadraron, paredes quedaron torcidas. El gobierno y la prensa no cuentan toda la historia. No sólo hay gente aún desaparecida, si no que hay cuerpos que no han sido reclamados, más triste aún. Hay personas que quedaron impresas en el edificio del frente, como en las explosiones nucleares. Los testimonios de los habitantes de las inmediaciones hablan de una ciudad triste, de gente que ha perdido toda fe. Hemos notado con Alina -con quien estamos trabajando en un documental acerca de los perros y la ciudad- que hasta los perros están silenciosos, la ciudad está de un luto sordo y humeante.
Qué vamos a hacer para que esta ciudad -que no calza con el modelo neoliberal, que es menos provinciana que nuestra capital y que ha sido oficial y extraoficialmente declarada en riesgo- sobreviva? Cómo hacemos para que deje de sufrir los embates de quienes no la ven, de quienes sólo vienen a tomarse un trago y jugar a la bohemia, de quiénes quieren convertirla en un mall con vista al mar?
Confieso que no se qué hacer. Mi familia está de luto, Valparaíso está hundido para arriba. Yo si he sabido un poco de su historia, y aunque sencillamente no nací allí por accidente, llevo varios años tratando de vivir ahí a ratos, pero el alma me duele cuando veo lo descuidada que está la ciudad y me dan cada vez más ganas de estar en otras partes. Qué pena, no?
Pero si hay una cosa que quiero destacar en el conexto de este desastre, los dichos del alcalde Aldo Cornejo de ese día me parecieron totalmente notables.
Foto por Eduardo Andrés.
Links:
- Trajedia en Pleno Barrio Patrimonial
- http://crecersindios.blogspot.com/2007/02/valparaso.html
- http://apuntesanalgesicos.blogspot.com/2007/02/recuerdos-sobre-una-calle-que.html
- Vivan los bomberos (no gringos) y Me Duele Valparaíso
- Desastre en Valparaíso es un weblog entero dedicado al tema:
- Casto y Puto, uno de los blogs porteños más productivos en post muestra el suceso con una mirada irónica y con los pies en la tierra.
- Valparablog, blog en la sección fotografía nos muestra las fotos que les impacataron a él.
- Cyberamérica y el fuego llevándose gente, trabajo y patrimonio.
- Valparisina , porteña radicada en Rancagua, nos cuenta como vivió la tragedia y expresa su respeto por nuestros bomberos.
- Alejandro Zamora añade más imágenes de la tragedia y del la llamada "Zona Cero".
- Perros, uno de los videoblogs de Pepa, nos habla de nuestros hermanos menores dentro de la tragedia.