Ignacio Rodríguez de Rementería

Nada Simple / Todo Simple


Corría octubre del 2003 cuando se comunicó conmigo Patricio Muñoz, sonidista de formación y realizador audiovisual por herencia, oficio y excelencia. Las circumstancias se dieron para que trabajáramos juntos en uno de los proyectos audiovisuales del cual me siento más orgullos de haber sido parte, la serie de TV documental Nada Simple / Todo Simple.

Patricio había comprado, gracias al apoyo del FONDART, una Sony PD150, y el representante chileno de Sony le había dicho que yo había adaptado una lente gran angular a mi cámara. Él quería hacer algo parecido, y como vivíamos a pocas cuadras y teníamos intereses y amigos en común, se animó a escribirme. Resultó que los dos éramos sonidistas, a los dos nos gustaba lo audiovisual y además mis amigos de Instrucciones de Uso, con quienes Patricio trabajó en la conceptualización de Nada Simple / Todo Simple, me conocían personal y profesionalmente. Así, me integré al grupo de personas que realizó esa primera etapa del programa, con Patricio en el rol de director.

Nada simple de hacer. Ese año fue difícil, y el que siguió también. Pero desde, con y apesar de las dificultades, hicimos ese trabajo con cuerpo y con alma, donde además de reinventarme como camarógrafo, pude ser parte de algo que iba más allá de mi y de quienes participábamos de su realización, pues los trabajos audiovisuales -y todo el arte quizás- es como hacer hijos, no le pertenecen a uno, si no a quiénes los adoptan como suyos, a lo más uno les pertenece a ellos. Por eso me gustó que nunca vi al Pato decir "mi serie". El programa, una mirada hacia la cultura y el arte de Chile, es de una narrativa no-tradicional, y se realiza desde Valparaíso, ciudad menos provinciana que Santiago.

Todo/Simple

Así, tuve la suertuda experiencia de conocer de cerca obras y personas relevantes en el ámbito del arte, incluyendo a los integrantes de La Troppa, Royal Deluxe, a Humberto Maturana, Armando Uribe y Gonzalo Rojas. Fue curioso porque en un contexto de conversación, persona a persona, vi como ellos --por azares del destino pero también con grandes esfuerzos-- han logrado llegar al lugar donde quieren estar y hacer lo que quieren hacer. Y me quedó la sensación de que fuera simple. Y en cierto sentido lo es. Lo más auténtico, lo más "bello" desde el punto de vista de algunos expertos, suele ser lo más honesto, lo más sencillo, lo más carente de artificio y disfraz. Hay algo en común que he visto en la gente más genial que he conocido y es la capacidad de conectarse, de manera casi dadaista --o sea intencionada pero poco racionalizada-- con un estado de flujo de consciencia, una coherencia del pensar, sentir, estar y hacer, un estado carente de miedos como "no va a salir bien" o "no se si es lo correcto", eso lo vi en estas personas.

Además de lo interesante de ese tipo de contacto, fue también una intensa experiencia tribal, de esas donde se forma un nosotros en que cada uno hace su función --no sólo porque le gusta (en este caso) o porque le pagan (en otros casos)-- si no porque los demás necesitan de eso para hacer su parte de un todo mayor que la suma de sus partes. Una de esas personas, a quien admiro porque vi más concentrarse en eso que en la precariedad, es Carola, cuyo proyecto llamado Herencia fue presentado al CNTV y distinguido con el tercer lugar en su categoría. También Rodrigo Fernández presentó -en representación de Dereojo, la compañía productora de Nada Simple / Simple- un proyecto para un programa acerca de la historia de Viña del Mar, que fue premiado con una subvención que permitirá su realización. También trabajé con Natalia Araya, una de las fotógrafas más talantosas y sensibles que he conocido en mi vida.

Nada/Simple

Pero volvamos al 2004, tiempo de realización de Nada Simple/ Todo Simple. Tenía que haber mucho talento y esfuerzo, porque los dineros que aporta el estado para iniciativas así suelen ser paupérrimos, y los que aportan los privados en ese momento fueron inexistentes. Trabajar en la producción de la serie fue como un curso de inmersión en la precariedad de recursos, y por lo mismo: de simple tuvo muy poco. Es impresionante como un proyecto tan lleno de contenido, tan innovador en su forma sonora y visual, se pudo hacer con casi cero peso. Y es terrible, porque el hecho de que se haya podido hacer así y bien, permite que el gobierno piense que esa es la manera correcta de hacer las cosas, y siga poniendo pocos pesos para proyectos de este tipo.

De hecho, actualmente se está trabajando en la producción de un segundo ciclo de capítulos de Nada Simple / Todo Simple, gracias a que nuevamente y en condiciones similares, el proyecto fue subvencionado por el Ministerio de Cultura, y eso es bueno -en el corto a mediano plazo- para el público que podrá ver el resultado.

Pero, qué hay con el largo plazo? Qué hay con los que tratamos de vivir de esto? No me puedo sacar de la cabeza la imagen de otro de los camarógrafos, que trabajó también por casi cero pesos y que ahora lo está haciendo otra vez, pero que no tiene además algunas suertes que he tenido yo. Él la semana pasada estaba pésimo porque no tiene certeza acerca de dónde va a vivir, y está comiendo porotos sin rienda ni salsa ni nada todos los días, así de nada, así de simple, porque no sabe cuándo va a conseguir otra pega haciendo lo que le gusta. Y eso es grave, pues, si hay dos o tres más como él, que tendrán que ponerse a trabajar de barman o DJ o publicista, no habrá más programas como Nada Simple / Todo Simple, como la Belleza de Pensar...

Todo/Nada

Hoy con Patricio estamos algo alejados. Por qué? Bueno... no es nada simple, pero yo me he vuelto a dedicar más a lo musical que a lo audiovisual, y más en Santiago que en Valparaíso, mientras que él y todavía aperrando en Valparaíso. Mientras que él está dispuesto a aceptar ubvenciones precarias y armar grupos que trabajan en parte por amor al arte, yo además de no estar dispuesto a lo mismo -pues creo que el trabajo tiene que ser dignamente compensando- pienso que es un error estratégico trabajar en esas condiciones, porque eso perpetúa el modelo de la precariedad. Pero Patricio, Carola, Natailia, Rodrigo, Claudio y otros han continuado, y les admiro por hacer de Nada Simple / Todo Simple un programa honesto, cuya manera de mirar es coherente y no se ve modificada por el criterio de avisadores, un contenido que me parece mucho más valioso que La Granja VIP, Los Treinta o Los Simuladores. Por eso, porque es un trabajo que tiene que ver con temas que he tocado antes en este espacio, y porque es un trabajo que se hizo con cariño, quiero invitarles a verlo, a partir del próximo domingo 7 de agosto a las 22:30 hrs. a través de las pantallas de Canal 13 Cable. También estará disponible, no se en qué fechas y horarios, en TV Chile, la señal internacional de TVN.

El primer capítulo incluye un documental sobre el montaje Jesús Betz, con la destacada compañía de teatro nacional La Troppa, presentado a través de la narración testimonial de sus protagonistas. También se presenta el video experimental Pinto Cinematic, basado en textos de Juan Downey, realizado por Patricio.

Linkografíá: