Parece que septiembre se las arregla para ser importante por alguna razón u otra. Se independizan países, se bombardean palacios de gobierno y edificios, nace casi tanta gente importante como en octubre y cambia la industria de la música. Por ejemplo: se lanzan sitios que regalan música a cambio de ver publicidad, Amazon comienza a vender mp3 y el CEO de Warner habla como si fuera entrepeneur de un sello indie.
Sigamos con el tema y volvamos a la pregunta que dejamos pendiente:
¿cómo hacemos para enseñar a la audiencia el valor del contenido?Si deconstruímos no solamente la frase, si no que alternamos el sentido de la palabra enseñar por el significado sinónimo de mostrar, tenemos una posible respuesta:
enseñemos contenido de valor.
A la vez, podemos deconstruir la relación sujeto-persona, o sea me pongo en el lugar como amante de la música y pregunto:
¿cómo descubro música de valor?... se me hace evidente que ya conozco la respuesta:
busco en la red música como la que me gusta.
Como usuarios amantes de la música, estamos aprendiendo a encontrarla allá afuera, en la 'net. Hay mucha música disponible gratis, y hay maneras baratas de pagar por ella si uno quiere. Encendiendo el cerebro nos damos cuenta de que si no pagamos de alguna manera por la música que amamos, los que hacen esa música se van a tener que dedicar a otra cosa.
Como productores de música, tenemos que aprender a hacer disponible y encontrable nuestra producción, además de hacerla linda linda, sin excusas. Pues el fenómeno de cola larga implica que nunca podremos -ni querremos- ser Madonna o Phil Collins, ni mucho menos Britney Spears. Querremos ser nosotros mismos, ser auténticos y tener algo que decir, para que nos tomen en serio y literalmente nos la "compren", aunque no paguen con dinero.
Enseñar, publicar, quizás incluso regalar contenido de valor. Nuestro grano de arena para menos tipo Britney Spears, mas tipo Sigur Ros. Menos DRM, mas mp3.
Mas y mejor producción encontrable
Una de las tendencias es el aumento de la calidad y encontrabilidad de la oferta. El escenario de la producción musical se ha visto modificado durante los últimos años, casi todos los músicos se graban en casa, ya casi no hay estudios de grabación grandes y caros. Significa esto que se está grabando mas música? si: muchísima música. Significa esto que hay mas música innovadora y mas canciones significativas? si, bastante. Y si bien también se está produciendo mucha música chatarra, el que haya mas música dando vueltas hace que haya mas de acuerdo al gusto de cada uno. En marketing: "segmentación del mercado". En negocios 2.0: desintermediación y personalización. La música está pasando de una economía de la escasez a una economía de la abundancia. La cola larga.
1.0 vs. "2.0", encender el cerebro
Otra tendencia es el aumento de la inteligencia del cliente. Hace unos años, tuve una reunión para asesorar a un conocido canal de televisión, que quería encargar el sitio web de su programa estelar. En el brainstorming surgían ideas , muchas considerando al cliente un "auditor" de la menera que es tradicional para la TV: fácil y bonito, o sea oligofrénico. Se notaba una pugna, porque había usarios de Internet en la reunión. Enconces propuse que "cuando la gente enciende el PC, enciende el cerebro, en cambio cuando la gente enciende la TV, apaga el cerebro". Con esto me gané el amor-odio del director, pero también logré que habláramos el mismo idioma y pudimos crear una experiencia valiosa para los usuarios, con lo cual fuimos durante el tiempo que duró el programa el sitio web de TV mas exitoso del mercado.
Ahora sabemos que la TV está out, porque el cliente ya no quiere ser pasivo. En todo ámbito y también con la música -ya sea por vias legales o ilegales- es mas efectivo usar la red que ir a una tienda en un mall, llena de bulla, empleados mal pagados y una oferta que conocemos de memoria. En mi caso he podido descubrir mucha música nueva que me gusta mucho, he redescubierto el placer de oír música y por lo tanto la música ha cobrado mas valor para mi.
El otro lado de la ecuación: la variable $
Pero saber cómo hallar la música es sólo parte de la pregunta. La industria no existe si no se financia. Y la industria no se financiará a US$1 por canción, porque poca gente querrá pagar eso.
Como usuario, quiero poder no sólo hallar lo que me gusta. Quiero poder hacerlo de manera fácil y legal, quizás pagar cantidades razonables o quizás no pagar pero saber que el productor está siendo compensando de alguna manera.
Como productor, mi pregunta sería: una vez que ofertamos contenidos de calidad, cómo hacemos para que el usuario final pague por ellos? Esta parte de la pregunta hoy tiene enfrascados a los grandes negociantes de los medios. Un excelente anti-ejemplo es NBC, que quiso aumentar el precio de sus series a casi US$5 por capítulo, siendo que hasta hace poco habían estado disponibles por la mitad de eso en la tienda iTunes.
NBC salío tan pa' tras, que ahora ofrecerá esos mismos contenidos gratuitamente en su sitio.
Mientras algunos sellos, estudios y editoriales tratan de sacarle las últimas gotas de leche a la vaca y canibalizarse lo mas lento posible, hay otras compañías, la mayoría pequeñas pero también algunas grandes, que están mas sintonizadas con la oportunidad que con la amenaza, que están entendiendo lo que sucede y tratando de hacer negocios en esa brecha entre audiencia y música, ofrecer una manera fácil de hallar y comprar la música que nos gusta, con perfiles y tal. En el caso de Amazon, están apostando por mantener los precios pero ofrecer descargas inmediatas y sin DRM para los compradores impulsivos. Amazon maneja una base de datos con perfiles de millones de consumidores de música. Otras compañías mas audaces como Amiestreet, SpiralFrog y We7 están arriesgándose mas que Amazon, ofreciendo precios mas bajos e incluso cero. En el próximo capítulo ahondaremos en esos casos.
Por ahora, nueva tarea para la casa: cuál es la música que mas disfrutamos escuchar? Qué hemos hecho para encontrar mas música de esa? Le dedicamos tiempo a esa búsqueda y a ese disfrute? En el próximo capítulo descubriremos quién nos puede ayudar a hacerlo.