Para quienes aún no lo hayan conocido, Amie Street es un servicio donde artistas pueden subir su música y melómanos pueden descargar la música que forma parte del sistema. No es el único sitio que opera bajo estas premisas, lo particular de este sitio es que el precio varía de acuerdo a la demanda, la música parte disponible gratis.
Cuando recién se incorpora una música, tiene precio cero para todos los usuarios. Se produce entonces una avalancha por descargar la música cuando recién se sube, lo cual genera de inmediato estadísticas acerca de su éxito. En la medida en que las músicas se van haciendo populares, el precio va aumentando y se generan ganancia (compartidas con el sitio) para los productores de los fonogramas.
Discrepo entonces de lo publicado por Nuestro Canto, Amie Street no es "una buena formula para vender musica online", pero sirve para evaluar comerciabilidad.
Con la profesionalización del desarrollo de sitios web, una de las tendencias que ha ido perfeccionando el arte es la incorporación de tests de usuarios a los desarrollos, gracias a los cuales los sitios son más usables. Amie Street da la posiblidad a músicos desconocidos de hacer algo similar, poner a prueba su música ante audiencias reales y no sólo los familiares y amigos.
En los tiempos de la radio, los sellos invertían dinero en encuestas y se guardaban los resultados para perfeccionar su marketing. Con servicios como Amie Street, el artista mismo tiene acceso a comprender la calidad de su éxito y puede usar el feedback resultante para su trabajo.