Se acerca el fin

Me refiero -naturalmente- al fin de año. Si bien he hablado hace poco del "fin de la industria" y de lo que alguna gente teme sea el fin del mundo, esas son otras historias.

Lo concreto es que se termina 2007. Año que ha estado marcado por acontecimientos significativos en todas nuestras vidas. El mundo de la música ha visto grandes cambios, mi vida también ha visto cambios importantes pero sutiles, interiores, de los que no había hablado en público aún. Y de los cuales no voy a hablar en este post tampoco, ja ja. Pero si voy a hacer un muy mini recuento de las cosas más destacadas del 2007 y dar también algunos agradecimientos.

Los hechos importantes:

me acerqué a algo parecido a la religión, conocí a una brujita, aprendí a dejar ir, vi cine que me hizo renunciar al placer de lo agridulce, hice algo de música y grabé a algunos talentosos artistas. Un proyecto donde participé fue premiado, fui dos veces a NYC, me acerqué de nuevo al mundo de la web, escribí muchísimo sobre la industria de la música y sobre música, incluso en La Nación, hice una encuesta sobre la norma para TV digital, además de convertirme por accidente en reportero ciudadano usando una plataforma de microblogging llamada Twitter.

Los agradecimientos:

Kelly, presidente de Petroglyph Records; por lo inspirador que fue su ejemplo, su confianza y su fe; a Paloma por su amistad infinita que trascendió toda categoría; a mi familia -especialmente a mi mamá Chantal y mi tío Tomás- por su paciencia y apoyo incondicional, y mi familia de Canadá y de Recreo/Italia/Alemania, quizás lejos físicamente pero cerca en el alma; a los músicos que han estado compartiendo conmigo mucho más que la música, como Marcelo Vergara, Javier Barría, Francesca, Jeannette, Cristóbal Tobar, Andrés Landón, Carlos Aguirre, Jorge Sacaan, Sol Aravena y varios más que se me olvidan en este instante.

En especial gracias a Prabha por ser un tremendo ejemplo de tantas cosas que valoro. Gracias en ningún orden particular a Joanna, Amal, Cati, Marcela, Sandra, Andrea, Lorena, Paz, Javiera, Flavia, Juanita, Daniela, Vivi, Carola, Daniz, Adel, Pascal, César, Claudio, Francisco y especialmente Carlos Smith, por tanto cariño. Quiero agradecer también los maravillosos re-encuentros que he tenido con María Paz Moya, Rodrigo Guaiquil, Juan Carlos Camus y Paulo Saavedra, que me han hecho retomar el gusto y la posibilidad de trabajar en medios de comunicación web. También a Alina que ha sido una tremenda amiga y además me invitó a ser parte de su proyecto A 50cm del suelo.

Particularmente quiero agradecer a mi primo Tommy, cuya inteligencia admiro mucho. También conocer a mi prima Laura -que canta y baila hipnotizantemente- ha sido uno de los regalos lindos del año, así como también conocer a Nina, hermana de mi hermana y que tienes los ojos iguales a los míos, y su hija linda Myriam. Quiero agradecer a un par de personas que no voy a nombrar, pero que están en mi alma por lo que me han dado, incluso a veces sin querer, y sin saber. Hay ángeles entre nosotros, y no son el mensajero, son el mensaje.

También hay ángeles que se han ido, particularmente Jazmín, que con su partida nos dejó una herida, pero también una experiencia que enseña acerca de lo que valoramos. Por favor que nadie más se vaya así.

Y por último pero no menos importante, agradeazco a quienes me leen, me siguen por Twitter, Jaiku y Facebook, me comentan y saludan por IM o incluso a quienes no saludan pero están. Todas las maneras de estar son válidas, compañeros.

Creo que estoy listo. Qué pase el siguiente (año).

Ignacio Rodríguez de Rementería